martes, 4 de agosto de 2009
Quién nos podrá defender de Nextel?
Ya pasó la moda del Nextel y es que eso de estar conectado al radio es un gorro que nadie en su sano juicio puede soportar todo el tiempo, además, por si fuera poco, el servicio es malísimo, amén de que te cobran cada minuto a precio de oro, claro que te dan la entrada muy fácil y para que te envicies del aparato, los hijos de su repin… te “regalan” sesenta minutos de telefonía y claro que el negocio estriba en que por confiados, los candorosos usuarios marcamos todas las veces que sean necesarias a cualquier parte, que al cabo, la móndriga compañía en su marketing internacional asegura que al estar comunicados sus clientes tienen “el poder de hacer”.
Claro que en este país gobernado de mala manera por los panistas que se pintan de azul como ojera de mujer, los ciudadanos de a pie son los menos importantes, porque Nextel hace y deshace a su antojo como si viviéramos en Haití y no en un país de leyes exactas que si no se cumplen al pie de la letra es porque los malos políticos en lugar de servir al pueblo, se sirven con la cuchara grande para beneficio de ellos, de sus familias y de sus compadres.
Yo tengo radio como casi toda la gente del pueblo, pero cansado del mal servicio, al término de ese plazo, los malhadados ejecutivos nada más porque los tienen muy azules, se negaron a aceptar la rescisión del documento alegando que según la letra chiquita dice que si en un tiempo perentorio el cliente quiere dejar de usar el radio que nunca sirve, no puede salirse, y si se sale, con la ayuda de los aparatos legales o con la fuerza pública, te sacarán de los pelos de tu casa para obligarte a pagar, y los jijos de chinflosca madre, los obdusmans, los encargados de nuestro bienestar para “Vivir Mejor” cierran los ojos, se hacen de los oídos sordos , se tapan las narices y se dedican a observa la manera en que estas compañías desmadran al país para beneficio de unos cuantos.
Nextel es la única compañía de comunicación que te cobra cada mes una renta fija aunque no te otorguen el servicio, es decir, si uno no paga a tiempo, te lo cortan -me refiero al radio- y conforme al leonino contrato te obligan a pagar mensualmente, pero lo peor no es eso, sino que en mi caso, siendo que había concluido el contrato de 18 meses, y como no quise renovarlo, me mandaron un citatorio para uno de esos despachos que por una iguala se alquilan como cobrones, siendo que los abogados, no todos, pero no se salva ni nuestro benemérito de las Américas, que éste decía que a sus amigos “Ley y gracia, a sus enemigos La Ley”, no quieren que les den, solamente que los pongan donde hay, y Nextel les da esas cuentas de clientes morosos que se niegan a pagar un servicio que nunca han prestado.
El objeto del presente Contrato, consiste en definir los términos y condiciones bajo los cuales NEXTEL presta, comercializa y brinda los “SERVICIOS”en favor de “EL CLIENTE”. Por lo que “EL CLIENTE” manifiesta que todos los datos asentados en la carátula del presente Contrato son ciertos, que ha recibido la información a su completa satisfacción respecto del contenido del presente Contrato y por lo tanto, ha comprendido en su totalidad los servicios que solicita y la forma en que “NEXTEL” presta los “SERVICIOS”, adhiriéndose al presente Contrato.
Lo malo es que todos los que deberían defendernos se tapan con la misma cobija o se hacen señas por debajo de la mesa, el obdusman José Luis Soberanes no puede defender ni a su vieja, porque no tiene potestad alguna, así que a lo único que se dedica es hacer “extrañamientos” , pero en la realidad es un defensor del pueblo sin fuerza ni en la mano izquierda que esa la maneja muy bien el loco de López Obrador para su propio beneficio y de las intelectuales zurdas que nunca han leído dos libros completos, porque hasta para eso tienen sirvientes quienes luego les hacen una síntesis.
Nuestros diputados tamaulipecos siguen dormitando a la margen del río, mientras los vivales se adueñan de todo bajo su mirada complaciente y es que ellos que deberían de legislar a nuestro favor, tampoco hacen nada para defendernos de estos “masiosares”, y es que hay unos que no saben ni la O por lo redondo, a ver cómo nos va con esta de nombre de payasita de fiestas infantiles pero por lo que se ve nos va a ir de la fregada, pero la culpa no la tiene la indita sino quien la hace comadre, además, quien va a creer que llegó ahí por su prístina inteligencia y el manejo adecuado de las leyes, si ya en este pueblo globero tenemos una historia patética de corrupción metafísica en tiempos de la tachuela cósmica.
No habrán alguien capaz de defendernos de estos cabrones de Nextel, ya no hay hombres a nuestro servicio con las agallas, ya no digo de sacar la cara por los indefensos ciudadanos y meterlos a la cárcel, sino simplemente de exigirles que dejen de robar a manos llenas por un servicio fantasma, yo sé que existe una dependencia que se denomina Profeco, pero también sirve para dos cosas.
Hay días en que uno amanece con la boca amarga y el hígado deshecho, pero en este Tamaulipas de políticos en pasarela parece que no hay nadie capaz de defendernos de los malosos y hacen lo que el gañán del chiste en el que le cuenta un amigo a otro, que afuera del Gusano Bar estaban tres cabrones pateando a un viejito como de 80 años, y su compadre le pregunta: “y te bajaste del carro”, el otro, con la sonrisa paseándole por las comisuras de los labios, le responde: “¡Claro! Y entre los cuatro le pusimos una chinga de perro bailarín”.
P.D: ¿Alguien sabe quién es el encargado de la salud pública de nuestro globero pueblo? Por favor díganle que en la clínica 78 del Seguro no hay aire acondicionado al clima y si de pasadita se encuentran al director del IMSS díganle que no sea inhumano, que nadie puede soportar estos infernales calorones o que si no puede arreglar el changarro que presente su renuncia para que otro más capaz resuelva dicha contingencia, y es que en la unidad de cuidados renales, los enfermos sufren dos veces, una por su enfermedad crónica y la otra, con los calorones que padecen. Ya dije.
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