El comercial de Aguirre

Es el colmo, nada más esto nos faltaba para acabar con el poco humor que aun nos quedaba a favor del TRI, ahora resulta que El Vasco, en lugar de dirigir bien a los buenos para nada de la “decepción nacional”, le ha dado por andar haciendo comerciales a favor de la unidad de los mexicanos, como si fuera tan fácil, y es que estos cabrones publicistas de plano se piensan que con sus mensajes de mente abierta podrán confundir a la perrada, si por más que se empeñen en decir que no pasa nada, que eso que se ve en las calles no son hampones reales, sino que están filmando una película de los Almada y que la sangre que corre es de utilería, pues permítanme decirles que ya nadie les cree, porque como a estos goebels de pacotilla les pagan verdaderas fortunas por echar mentiras a diestra y siniestra, no les importa nada, además son tarados, o ya no se acuerdan que fue el propio Aguirre quien viajó ex profeso a su añorada madrastra Patria para despotricar contra el país, lo menos que dijo de esta raza cósmica guadalupana, fue que éramos unos bandidos huevones y que en todos lados reinaba la violencia, la inseguridad y la pobreza, claro que en cada uno de los rubros tiene toda la razón, pero que no venga con el cuento de que ama a México con todas las entretelas de su regachupín corazón, porque eso ya no se lo cree ni su mamá, por si fuera poco, en el comercial que se transmitió este domingo en cadena nacional aparece La Victoria Alada de paisaje de fondo, como si el Ángel a donde van a celebrar las victorias o las derrotas todos los aficionados al futbol le sirviera de símbolo para un mexicanoide con ínfulas de gran tlatoani del deporte.
El mensaje de El Vasco, dice: "Soy Javier Aguirre y amo a México", Durante el spot, hizo un reconocimiento a los mexicanos y a la historia del país. "En 1810 sonaba imposible que México fuera un país independiente, y lo es, en 1910 parecía imposible que México llegara a ser un país democrático, y lo es". Aguirre convocó a la sociedad a participar y a volver a soñar y actuar, "para decidir si queremos ser el país destinado al fracaso o a construir el destino anhelado".
Y como si fueran cabalísticas, sus palabras huecas, sin sentido ni sustento, convoca a los mexicanos de pasar del “sí se puede, por el ya se pudo”. A través de Iniciativa México, reconoció los esfuerzos de la sociedad mexicana que contribuyen a construir un mejor país, en la que también pidió "enterrar la México de los complejos y a alumbrar el México de los hombres seguros de sí mismos".
La verdad es que su mensaje suena a más de lo mismo, un discurso fiambre que parece escrito con la misma mano y, lo que es peor, con las mismas aviesas intenciones de los fementidos políticos que siempre dicen lo mismo, con el mismo sonsonete, con ese vaivén aburrido de pausas inadvertidas, además, saben que lo que dicen no es cierto y que quienes escuchan el discurso tampoco les creen, es una escena aburrida de la democracia con acentos de dictadura, el dejar entrever entre líneas, que, por lo pronto, los que están en el poder son ellos y que son los que mandan, mientras se llega el momento de salir disparados de sus sexenales sillas sus decisiones son las que cuentan y como decía mi amá, cuando alguien le cuestionaba su autoridad. “porqué lo digo yo, por eso y se chingna porque en esta casa se hace lo que yo digo”.
Javier Aguirre debería de ponerse a chambear, para que Vela ese pendejete que estando mano a mano con el portero, falló el tiro a gol, en lugar de andar mostrando su cara que parece sobaco de elefante, en la tele nacional, en fin, ya se sabe que estos prófugos de las neuronas, no son muy avispados, pero que quede claro, queridos lectores, que esos spots son intentos inútiles de arengar a un país desangrado, hambriento, desconsolado, harto, y para colmo, estos ineptos jugadores en lugar de hacer goles, hacen sándwich y su entrenador se alquila para hace estos chafas comerciales. Ya dije.