jueves, 2 de junio de 2011
Una nueva palabra
Nunca he sido merodeador de diccionarios, escribo con las palabras que conozco, que finalmente son las que me permiten confeccionar ideas, las otras, las que existen en el idioma, serán muy explicativas, pero como no forman parte de mi vocabulario cotidiano, no hay ninguna posibilidad de que las pueda usar, a veces, sólo a veces, se me atoran en el teclado frases casi hechas, pero por un vocablo suelto, ese que reticente se opone a ser mal usado en mis sencillos textos, no puedo redondear un enunciado, ya sé, que ustedes, queridos lectores, han de pensar que soy muy exagerado, pero los que, como yo, se han dedicado toda la vida a este noble oficio de escribidores, entenderán de lo que hablo, por cierto, ya saben que ustedes son los primeros en tener la primicia cuando me agencio una nueva palabra, y seguramente esto le dará mucho gusto a mi buen amigo el escritor y poeta Alfredo Arcos a quien deberían de otorgarle un puesto estatal en el rubro de cultura, ya que, perdonen la invectiva, no conozco a nadie en el globero y tierrero pueblo que tenga más derecho a ocupar una silla en dicho departamento, digo, si se trata de colocar a alguien realmente culto, pues no lo hay más informado en toda la comarca, pero les comentaba acerca de la novedad en mi léxico, resulta que leyendo al español Camilo José Cela, me encontré una de esas joyitas refulgentes del castellano y esa es cuévano, a poco no suena como a cueva y ébano, pero no, no es así, se trata de un cesto en la que las mujeres pasiegas echan las uvas que van recolectando, incluso lo usan en las espaldas a manera de mochila para colocar a sus bodoques, a pesar de que estoy aprendiendo nuevas palabras, me sigo asombrando de las declaraciones de algunos políticos, y es que don Javier Lozano, secretario del trabajo, anda suelto ante las cámaras y micrófonos de la prensa nacional, con razón o sin ella, anda diciendo que nadie lo va silenciar, será que con el destape muy a lo priista del “seis mil pesos” Cordero, se va a soltar la arrebatinga por la candidatura del PAN a la presidencia de la República, lo raro, no es eso, sino que, parece que nadie del partido azul se ha dado cuenta que la ciudadanía está bien fastidiada de que usen los medios para ventilar sus odios correligionarios, yo les sugiero que se calmen y como lo hacían antaño los tricolores, que el presidente llame a los vociferosos a Los Vinos para que le bajen dos rayitas a sus discursos ofensivos en la guerra intestina, a estos les está pasando como a los perredistas y en general a todo el izquierdero, que se están aniquilando unos a otros, al rato, va a pasar como la canción infantil de los perritos que se van a descartar uno por uno hasta que ambos partidos desaparezcan, otra noticia que me parece descabellada, por no decir que estúpida, ahora resulta que los maestros están obligados a presentar exámenes para evaluar sus capacidades, dicen que eso será por ley, cada tres años, supongo que como son consentidos del sistema, aunque reprueben, nadie los correrá de sus puestos, que al cabo, la educación de nuestros niños y jóvenes a nadie le importa, ni a la máistra Elba Esther, ni mucho menos al bien peinadito Lujambio, tampoco es que lo pobres maestros sean culpables de todo, pero a nadie, ni a estos magisteriales empleados del gobierno, se les puede exigir gran sapiencia con la magra educación que han recibido, digo, después de la secundaria al ingresar en la Normal, no deben conocer ni siquiera la O por lo redondo, conste que no los estoy defendiendo, si yo sé que no tienen perdón de Dios ni de Justo Sierra, pero no se le pueden pedir peras al olmo, que bastante hacen con deletrear el abecedario a los párvulos, y agárrense de la brocha que me voy a llevar la escalera, el presidente Calderón ha bajado de popularidad a la mitad, bueno eso según Roy Campos, al que no le creo ni el Padre Nuestro, este fue el mismo que dijo, en su momento, que López Obrador estaba arriba como con 20 puntos porcentuales en la elección del 2006 y ya ven lo que ocurrió. Y sigue la mata dando.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario