Contestadora automática

El otro día marqué a una empresa y me contestó una chinche vieja con voz muy sensual, no como la de una locutora de aquí del pueblo, que habla como si le estuvieran pellizcando una chichi, la verdad es que no sé si era una grabación porque parecía que se dirigía a mí con toda amabilidad y comedimiento, de hecho, me explicó todo el menú de posibilidades para hablar con quien se me antojara… “el uno lo enlazará a la dirección general” y yo pensé para mis adentros… ni siquiera conozco al director, ni modo que él si quiera hablar conmigo… “el dos lo enlazará al departamento de administración” y yo creí que era una broma, si esos administradores en lo único que piensan es en agarrar un poco del dinero que manejan para meterlo a su cuenta, ya cuando llegó al tres, le grité a la recepcionista, que si ella quería hablar con su chinflada madre que marcara el nain uan uan, repuesto del disgusto, mi sobrino Efleuberto me dijo que a él también le había pasado lo mismo cuando intentó hablar a una sucursal pedorra de Banamex, que es un banco de medio pelo, pero tratan al cliente como si fueran una sucursal de un banco suizo, yo, por eso cerré mi cuenta en esa institución porque era más lo que les pagaba cada vez que sacaba dinero de un cajero automático que lo que ganaba por mis honorarios, supongo que ese es su negocio, hacer que la gente crea que es buena idea meter el dinero a sus cajas fuertes y que no les costará un solo centavo, lo que nunca dicen en sus comerciales, es que los únicos que ganarán serán ellos, estos cabrones banqueros son peores de agiotistas que Shylock personaje del Mercader de Venecia, nada más les falta pedir la libra de carne si el cliente no paga a tiempo su deuda, lo que estos no saben es que la usura se castiga con el infierno, bueno, eso según el evangelio, además, a estos no les ha de preocupar dorarse en la sala purgatoria mientras se hinchen de dinero a costillas de robarles a los usuarios incautos, por cierto, hablando de rateros, alguien sabe qué pasó con el tracalero de Ramón Garza Barrios y su gavilla de colaboradores del trienio anterior, porque los muchos millones que dejaron de deuda ahora están pesando harto en la economía del globero pueblo, de verdad no habrá alguien que se haga cargo de toda esta runfla que dejaron en bancarrota a Nuevo Laredo, lo que yo no acabo de entender, es como fueron a endeudarse tanto, si todo parecía perfectamente controlado, que yo sepa, jamás suspendieron los cocteles chabacanos de la comparsa cursi de los de cultura, ni las grandes pachangas con cargo a la caja chica del erario grande, mi tía Petrita, decía que el dinero tenía que cuidarse para que rindiera para todo, y estos del trienio del eslogan naco y cursi de: “Nuevo Laredo, una ciudad con Valor”, nunca lo cuidaron, si dicen que todos los empleados de mandos medios para arriba tenían Nextel cuya factura pagaba el ayuntamiento y no sólo eso sino también la gasolina y todos sus viáticos, una vez, conste que no fue mi culpa, acudí a una cena con todo pagado al restaurante El Rancho, quesque para ofrecerles una fiesta a unos toreros muertos de hambre y eran como 300 personas que gorrearon a Ramón que dio un discurso bien bonito, yo acudí acompañando a Mónica González Teneyuque, la que, por cierto, pagó los güiskis que me tomé, pero ahora resulta que los funcionarios de la cueva de Alí babá, lo qué hacían era estar endeudándose para salir del paso, estos son como mi tía Chana la tracalera, que pedía dinero a todas sus comadres para hacer las fiestas y luego se andaba escondiendo para no pagarles, lo que es peor, estos marrulleros políticos, se hacen los ofendidos en todos lados para atacar y defenderse al mismo tiempo, francamente no sé cómo pueden dormir con la conciencia sucia, espero que no vuelvan a contratar a ninguno de esos para que administren nuestro dinero. Ya dije.