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viernes, 26 de febrero de 2010

El padrecito porno

En todos lados hay hombres calenturientos, pero esta historia de verdad no tiene desperdicio, y es que, un sacerdote español cuyo nombre no me he reservar, ya que como vive tan lejos que aquí nadie lo conoce, digo, si fuera un padrecito de la localidad, pues no lo delataría, si ya se sabe lo que se dice, que las sotanas sucias se lavan en casa, y menos ahora que estamos en plena cuaresma, no vaya a ser la de malas que si balconeo a alguien de mi diócesis, me vaya a lanzar una excomunión fulminante, pues resulta que el clérigo Samuel Martín de 27 años de edad, fue destituido luego de descubrirse que gastó una considerable suma de dinero en productos pornográficos, pero no hubiera pasado nada malo al cachondo católico, pero al muy tonto, se le hizo fácil tomar dinero de las limosnas de las dos parroquias que regentea en Toledo, dicho sea de paso en donde se hacen los mejores cuchillos del mundo, para saldar la cuenta de 17 mil dólares que debía a varias compañías proveedoras de sexo por internet y claro que sus fieles se le echaron encima, aunque en el pueblo ya se venía rumorando que el tal Samuel era muy libidinoso que veía a doña Encarnación con ojos de padrastro marihuano, porque la casi beata siempre andaba enseñando los chamorros, y que le daba sus arrimones de cirio pascual a la Pilarrica, y ya sé que es con una erre pero como dicen los vecinos que estaba muy buenota, pues le agregué la erre que le faltaba para describir con justicia las redondeces de la guapa española.
El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, informó a través de un comunicado que el cura había sido suspendido debido a la existencia de “irregularidades económicas en ambas parroquias”, aunque se reservó los detalles de las cuentas del cura, y eso es más viejo que la roña, les recuerdo, queridos lectores, que nuestra santa madre la iglesia católica mandaba quemar a los apostatas, a las brujas y a los que se le oponían a sus deseos de acumular riquezas, pero nunca ha oreado sus sotanas al sol público, por supuesto que la feligresía ya no es como antes, las ovejas son contestonas cuando algo no les parece, así que, se pusieron de acuerdo para mandar a don Venancio y a doña Prudencia a la cadena de radio Ser, que es la más importante de esa región, hagan de cuenta como la estación donde trabaja eficientemente Fernando Fernández mi compañero y amigo de muchos años, y ahí declararon que el padre en cuestión hace un año fue destinado a los pueblos de Noez y Totanés, desde luego que perspicaces como son, los casi 1.200 habitantes que suman entre ambas poblaciones comenzaron a sospechar del cura recién llegado, incluso, en una reciente misa reconoció que “había cogido dinero” de las limosnas “porque le hacía falta para un asunto”.
En su comunicado, el arzobispo de Toledo y primado de España ofreció “disculpas a las personas y entidades afectadas” y confía en “la ayuda de la oración y de la misericordia divina”. Casi dijo lo mismo que Monseñor Norberto Rivera nuestro príncipe de la iglesia cuando pescaron al sacerdote incómodo poblano al que le encantaba meter a la sacristía a los jovencitos más lindos del relicario de América, a quienes les prometía indulgencias plenarias si jugaban con él al burro castigado, pero como todos estos se tapan con el mismo manto celestial, el jefe inmediato superior del malas mañas del padrecito Samuel Martín, nunca describió que el joven cura también se prostituía a través de internet, donde se presentaba como: "Héctor, hombre hetero español, al servicio de tu felicidad". "Para mujeres y parejas, bien dotado. Estoy abierto a todo excepto al sado, no os arrepentireis, os haré gozar de felicidad como nunca", decía el anuncio, ya retirado de la red. Que san Juditas Tadeo mi protector divino, me perdone por andar de chismoso, pero si lo sabe Dios que lo sepa el mundo. Ya dije. Oremos.

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