Beato Súbito

Digan lo que digan, siempre va a pesar sobre su recuerdo, el estigma feroz de la náusea social, al permitir, que el padre Marcial Maciel, director espiritual y propietario de la orden de los Pederastas (Legionarios) de Cristo, regenteara a su capricho y antojo, una de las congregaciones más corruptas en la historia de la iglesia romana, y es que, para nadie es un secreto, que el Papa Juan Pablo II, era amigo muy cercano del nefasto michoacano que, entre otras bajezas, sometió a sus bajos instintos a cientos de niños con la complicidad socarrona de sus más fieles empleados, pero sobre todo, del Sumo Pontífice que aprovechó la coyuntura económica de miles de millones de dólares que le otorgaba sin ninguna restricción, el otrora poderoso santón michoacano, que todavía, viéndose en la situación penal que pesaba sobre su cabeza, se sentía beato, es más, casi con un pie para treparse a los altares por toda la eternidad, dicen sus defensores que el santo Padre ignoraba todo cuanto ocurría en la orden de los Legionarios, pero como dice el dicho, no me defiendas compadre, pues no se sabe que es peor, que estuviese enterado, o que de plano, un hombre tan encumbrado en la silla de san Pedro el hacedor de la iglesia católica, se negara a ver tan nauseabunda realidad, en fin, que el asunto de su beatificación todavía habrá de levantar ámpula en los diversos ámbitos internacionales, porque algunos dicen que la prisa del Papa Benedicto 16, se debe a que su pontificado no ha sido tan exitoso como se esperaba, no hay que olvidar que los dueños del Vaticano, son ante todo, buenos políticos, que no se les escapa una, no de balde, empezaron su fortuna con un humilde pesebre, y miren, ustedes, queridos lectores, en lo que se ha convertido este emporio espiritual que tiene grandes sumas de dinero bien habido gracias a las limosnas de los millones de católicos alrededor del mundo, para esta hora en que escribo esta columna, ya se ha dado la ceremonia con gran pompa y circunstancia, pero la reseña completa la daré en los días siguientes, yo considero, como católico que soy, que el Papa Juan Pablo II si es merecedor de su asunción a los altares, ya que irradiaba su carisma espiritual con tal donosura que hasta los apostatas se inclinaban ante su enorme poder, lo demás, los asuntos penales, que lo resuelvan los altos prelados, que para eso están ahí, además, no tengo la menor duda, de que nadie, escapará del día del juicio final y ni modo que se escondan en los rincones de los infiernos, que ya se sabe que cuando Dios da una orden hasta los demonios obedecen, lo raro es que, a sabiendas, estos santones se hagan como que la virgen les habla y a veces no la ven ni parpadear, en fin, que habrá que esperar que es lo que ocurre de aquí a su canonización, porque el primer paso es este, por cierto, a dicha ceremonia asistirá nuestro presidente Calderón y su esposa doña Margarita, el que se echó para atrás fue el gel boy, Enrique Peña Nieto, quien dijo que iba en calidad de ciudadano común, y que me perdone, pero ni modo que lo invitaran de otra manera, si él, es un sencillo gobernador de una entidad federativa, es decir, no es jefe de estado, a don Felipe, lo invitaron con todo y su carnet para estar en las primeras filas dado su carácter de primer mandatario, a Peña Nieto no le podían dar el mismo tratamiento, ya que le faltan tres estrellas para llegar a general, por lo pronto a la Gaviota naca de su vieja se le sebó asistir a tan importante evento católico, que desde ya, está inscrito en la historia de la humanidad, porque es una beatificación exprés, siendo que las averiguaciones, papeleos burocráticos y conclaves espirituales se llevan décadas, la verdad es que, ya teniendo los restos mortales de Juan Pablo II para su veneración y las reliquias, la gente se volcará ante su féretro para rendirle pleitesía al Papa que cambió el rumbo del planeta, supongo que algunas hijas de María, varios caballeros de Colón del globero pueblo ya están en Roma, ojalá que allá se queden. Ya dije.