A 13 años de la muerte de Octavio Paz

Hace unos días, precisamente el 19 de Abril de 2011, se cumplieron 13 años de la desaparición física de Octavio Paz, pero su deslumbrante obra sigue tan viva, que sigue asombrando a sus millones de lectores y admiradores alrededor del mundo, para muestra un botón, bueno, dos botones, espero que les guste lo que ahora les compartiré, les aclaro, asiduos fans, que no pretendo que esta columna, que es más suya que mía, se convierta en una especie de Guillotina docta, líbreme sor Juana Inés de la Cruz de semejante idea, mi único deseo, es poder compartir con todos ustedes, algunos autores de los que me agradan, además, con eso de que esta semana santa, he decidido tomarme unas cortas vacaciones, que las tengo bien merecidas, ya que jamás de los jamases, en estos tres años que tengo prestando mis servicios en Líder Informativo, he descansado ni un solo día, a veces, durante las fiestas de fin de año, con la ayuda de mi editor en jefe, el talentoso Jhovanni Raga, he confeccionado un top 5 para tener libertad de disfrutar como cualquier mexicano decente de los eventos que se generan durante los estertores del calendario, pero ahora, con la anuencia de mis jefes inmediatos, le he bajado el ritmo a la hechura de las columnas, así que no se asusten si de repente, han leído una que otra repetida, me disculpo, sobre todo, con los que tienen la buena costumbre de leerme a diario desde hace más de MiL artículos que he escrito para esta sección Show, en la que me siento de lo más contento, aunque alguna vez, una gordita muy simpática, de nombre Verito Ibarra, me dijo que le estorbaba mi columna para la realización de sus diseños, lo bueno es que, ese comentario no me afectó el ánimo, ya que siempre he tomado las cosas de quien vienen, y la familia Suárez López y Dorina Lozano, me han tenido de consentido de entre sus empleados, incluso, ella ya no está en la nómina y yo sigo cobrando cada quincena, aunque, en ocasiones siento que me pagan de a gratis, porque tampoco es que sea el mejor periodista del pueblo, en fin, que mejor daré paso a mi admirado Maestro Paz, que es, de entre todos los demás, un escultor de las palabras, que a través de sus letras supo confabular un prodigioso sistema de ideas del intrincado teclado de sensibilidades de los seres humanos, lo que resalta en su obra, es el hecho de la universalidad de su quehacer, ya sé que no soy especialista en el tema, si eso lo tengo muy claro, mi comentario en la presente columna, es, como ya lo he dicho reiteradamente, mi percepción personal de tan grandioso poeta, es decir, lo expreso asistido por mi derecho inalienable de emitir mi apreciación de cualquier tema, naturalmente que conozco mis limitaciones, tampoco me ciega el amor propio, por si no lo sabían, DON Octavio nació el 31 de Marzo del Año de El Señor de 1914 en la muy Noble y muy Leal ciudad de México, por tal razón, en recuerdo a su memoria, he traído a colación al notable escritor mexicano.
“Decir, Hacer” Entre lo que veo y digo, Entre lo que digo y callo, Entre lo que callo y sueño, Entre lo que sueño y olvido La poesía. Se desliza entre el sí y el no: dice lo que callo, calla lo que digo, sueña lo que olvido. No es un decir: es un hacer. Es un hacer que es un decir.
La poesía se dice y se oye: es real. Y apenas digo es real, se disipa. ¿Así es más real? Idea palpable, palabra impalpable: la poesía va y viene entre lo que es y lo que no es. Teje reflejos y los desteje.
La poesía siembra ojos en las páginas siembra palabras en los ojos. Los ojos hablan las palabras miran, las miradas piensan. Oír los pensamientos, ver lo que decimos tocar el cuerpo de la idea. Los ojos se cierran Las palabras se abren. P.D: Les deseo a todos que disfruten estas vacaciones de Semana Santa, y no olviden cuidarse mucho, que andan los diablos sueltos, les recuerdo lo que decía mi tía Zenaida, que no es bueno ponerse en el tocadero. Oremos.