jooble.com

martes, 12 de abril de 2011

Mil Guillotinas

Esta Semana Santa celebraré por todo lo alto un evento de alta envergadura (palabra de diccionario… te alabamos Real Academia de La Lengua), pero ni crean que se trata de un mitin político, que a mí nunca se me ha dado andar en esos vericuetosos asuntos, se trata, ni más ni menos, de un número redondo en mi peregrina vida como escribidor de historias en esta mi casa hecha de palabras, y aunque parezca que son muchas columnas, en realidad nada más se trata de un bonchecito rabón, ojalá que mis compañeros, amigos y familiares se pongan guapos con un regalito, que no todos los días, un viejillo como yo, con todos los achaques posibles, dado mi avanzado estado de putrefacción espiritual, “acompleta” las primeras mil Guillotinas en este Líder Informativo de todas las entretelas de mi corazón, naturalmente que no me ciega el amor propio y reconozco que tampoco soy el mejor periodista de Nuevo Laredo, tal vez, mi única posible cualidad, es que escribo lo que me dicta el sentido común y jamás he aceptado coerción de persona alguna.
Mis artículos, por naturales, por espontáneos, siguen conservando la frescura de la palabra que debe ser aliento y no sepultura, pero no quiero hacer pachanga antes de tiempo y mejor me espero a que sea el número exactito, como mi conciencia ya empezó a molestarme, no quiero mentirles, asiduos fans, lo que ocurre, es que mi deseo ferviente es irme de vacaciones en Semana Santa, así que, el hecho de llegar a las mil columnas, puede ser un buen pretexto para publicar el top 10 de las Guillotinas menos piores que he redactado durante estos tres años en Líder, y pensar que, en algún momento, había decidido abandonar el barco, por cuestiones meramente económicas, ya que me salía más caro el caldo que las albóndigas, pero ni viene al caso comentarlo en este momento de suprema dicha, gracias a todos ustedes, queridos lectores por aguantarme tanto tiempo, a los que me mandan saludos con mensajeros, felicitándome por mi columna, les quiero decir que, cuando me llegan sus enhorabuenas, son el mejor premio que puedo recibir por mi chamba, bueno ya, no me quiero poner melalcohólico, así que cambiaré de tono, porque si no, me echaré a llorar y embarraré de mocos mi laptop de bulbos, mejor les diré que en el globero pueblo vive una mujer a la que me gustaría mandarle a hacer una estatua nomás pa’ que todo el día la caguen las palomas, claro que la chinche vieja a la que me refiero siempre se ha batido en un estiercolero, aunque ella, ahora que ha caído en la desgracia, se dé baños de pureza, como si los ciudadanos no tuviéramos memoria de lo que ha sido su peregrinar en este valle de lágrimas, claro que, eso de las estatuas es casi siempre en honor a gente que no las merece, a ver, qué alguien me explique qué tiene que hacer un busto del prócer panista Manuel J. Clouthier, --dicho sea con todo respeto--, en la placita Miada, a la que por cierto le pintaron el mobiliario urbano con un color verde mayate bien llamativo, pero lo único malo es que no hay agua ni para regar los escuálidos nogales, muchos menos para que la gente que acude se eche un buche para mitigar la sed, digo, yo hubiera preferido que levantaran una estatua en permanente homenaje al profesor Santos Guzmán Treviño o al profesor Juvenal Boone Flores, que estos si hicieron algo de provecho en el pueblo para beneficio de varias generaciones de paisanos, pero El Maquío, que yo sepa, no hizo nada digno de encomio, ahora nada más falta que quieran ponerle un monumento a Chente Fox o a Marthita, espero que no se les vaya a ocurrir semejante barbaridad, lo bueno es que a esos azulitos cada día que pasa les queda menos tiempo en el poder, yo, por lo pronto, he estado haciendo campaña proselitista a favor del PRI pero en contra de Peña Nieto y su Gaviota esposa, a la que, dicho sea de paso, la gente de Neza le quitó su nombre a un parque, eso es lo malo de darle poder a esta gentita que le encanta el mitote y el metate. Ya dije.

No hay comentarios: