"La Cargada" de Cordero

Ya no hay pudor en este país, el PAN, que tanto ha odiado las formas de hacer política del PRI, le está copiando el estilo en todo al partido tricolor, y es que, tal como lo hiciera el entonces gobernador de Jalisco, de cuyo nombre no quiero acordarme, que salió a la escena pública con mucho tiempo de anticipación, para anunciar a México que su mero gallo era Gelipe Calderón, con todo y que el favorito de Chente y Marthita, era Santiago Creel, ahora resulta que algunos ambiciosos panistas han candidateado a Ernesto Cordero, el mismo que dijo que con seis mil pesos, los mexicanos podíamos tener casa, carro y chingos de comida en el refrigerador, actualmente es secretario de Hacienda, tal vez, por esa razón, cayó como balde de agua fría su absurda declaración, de la cual, luego se pa’traseo, diciendo que se habían mal interpretado sus palabras, lo cual, quiere decir que además de echador de pachotadas, es rajón, porque cuando dijo lo que dijo, lo hizo ante una cámara y hay pruebas fehacientes de sus dichos, era más fácil decir: “si lo dije y qué”, pero si les digo, asiduos fans, que estos azulitos cada día que transcurre, se parecen más a los tricolores, porque esa “cargada” a favor de Cordero, es muy priista, algunos sesudos analistas, dicen que el palomeo viene desde Los Vinos, que me disculpe don Felipe, pero se me hace que don Neto no tiene agallas para sostenerse en el candelero, Creel y Lujambio, los galanes otoñales del PAN, que ya se sienten trepados en la silla poderosa, despotricaron contra sus malos correligionarios, Creel ha declarado que lo único seguro es que Cordero es el candidato oficial, y el sospechosismo de don Santiago, tiene fundamentos reales, ya que 134 distinguidos panistas que apoyan el destape son muy cercanos a Calderón, si esto fuera una telenovela, se llamaría: “Gelipe y Neto: dos panistas y un destino”, naturalmente que la política tiene más villanías que las teleseries, y aquí si hay de todo un poco, es un ámbito en el que no hay amigos de verdad, pero los enemigos si lo son, y nadie se tienta el corazón para dar la puñalada trapera, así que, siempre tienen que andar con las nalgas pegadas a la pared, porque al menor descuido, les avientan un jabón al suelo, para el bien peinadito Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública, Cordero no es el candidato del Presidente de la República, y explicó que en el PAN no pueden avalarse las cargadas, además, como si lo creyera realmente, declaró: “yo voy a contribuir a la unidad, pero siempre respetando nuestra cultura, porque la identidad panista es lo que nos da más fuerza”, pues yo digo, que si se espera un poco más a que todo se desarrolle como es debido, se quedará llorando a la vera del camino, lo bueno es que, es uno de los favoritos de la máistra Elba Esther, que tampoco es poca cosa, ya se sabe que la empoderada profesora es dueña de la educación en nuestro país, que hace y deshace a su antojo, así que Lujambio no habrá de quedar tan dejado de la mano de Dios, mínimo le da dos o tres plazas de aviador, amén de que si se queda sin esperanzas para la grande, igual lo puede candidatear por el Panal como buen zángano que es de la abeja reina, ya ven que con eso de que el PAN, anda de copión con el PRI, no ha de tardar mucho tiempo para que en sus discursos incluyan las frases íntimamente ligadas a los discursos amanerados de los priistas, esas tan legendarias que de tanto ser repetidas en las multitudinarias concentraciones en el zócalo o en los kioskos de los pueblitos pedorros, ya están grabadas en los archivos permanentes de la memoria de los mexicanos, en fin, Dios quiera que don Ernesto, el de los seis mil pesos, si sea el bueno, porque es segura su estrepitosa derrota y no que me caiga mal, pero eso de andar agandallandose a la mala, no es para festejárselo, los panistas, en lugar de andar con estos destapes adelantados, deberían de ayudarle un poco en su hueveada campaña al pobrecito de don Luis Felipe Bravo Mena que ya no siente lo duro sino lo tupido. Ya dije.