Cambios con la Edad

Sin duda, la edad me ha dado la calma necesaria para esperar con cautela las sorpresas que otorga la vida, y miren ustedes, queridos lectores, que antes, muy antes, como dice el poema de Alí Chumacero, la impaciencia propia de mis años jóvenes, que algún día también tuve veinte, me orillaba a cometer errores tan garrafales que a la vuelta de quince minutos ya me había arrepentido de lo ocurrido y es que los resultados finales casi siempre eran en mi contra, pero ahora, bajo el dintel del umbral del tiempo, soy capaz de sentarme a ver pasar los cadáveres de mis enemigos, y conste que esa cita no es mía, sino de algún moro vengativo, que ya se sabe que los árabes son capaces de realizar cualquier hazaña para aplicar lo de “ojo por ojo” aún en contra de su propia familia, y ese proverbio antiguo, lo incluyo, en esta oportunidad, sólo para subrayar el hecho de que ahora gozo de una pasmosa tranquilidad que me permite sopesar los pros y los contras de las consecuencias de mis palabras y de mis actos.
Yo sé que muchos de ustedes no creen en mi radical transformación, porque me conocen desde hace muchos años, pero les confieso, que ahora con la meditación trascendental que practico, mis posturas de yoga, la dieta macrobiótica que me he impuesto, la relación extrasensorial con los espíritus buenos de la galaxia y sobre todo, gracias a que he podido sobrepasar los obstáculos que la propia vida me ha impuesto, claro que no les voy a contar los avatares de mi destino, que esos secretos se irán conmigo a la tumba pero lo que si les voy a confiar, pero por favor no se lo comenten a nadie, es que la mujer que se siente la divina envuelta en crema de chocolate y parida por Zeus en realidad tiene un historial de vivencias acumuladas con diversos hombres que le han dado en efectivo o en especie los bienes que ha acumulado a lo largo de tantos años de andar en la farándula empresarial.
A mi no me cae mal, al contrario, si su negocio en su tipo, siempre ha sido el más productivo de todos los que hay en Laredo y pueblo circunvecinos, lo único que no me parece conveniente para ella misma y su propia familia es que navegue con bandera de que no sabe que lo que hace es ilegal, inmoral y engorda, además, se hace como la tía Lola, porque todos sabemos a lo que se ha dedicado toda la vida, porque su empresa si bien es cierto que es muy próspera no da para tanto, además a hacienda no se le puede engañar, al menos no todo el tiempo, y por si fuera poco, ya su juventud y belleza, se les escaparon desde hace 40 años, a menos que todavía le queden las mañas del pasado, y es que dicen, que perra vieja no tiene diente pero tiene colmillo.
Yo nunca la he tratado pero dicen que es peor que la Elba Esther Gordillo, que por lo menos la Maestra tiene móviles muy altos y ganancias espectaculares no sólo de dinero sino de poderes súper especiales como las chicas superpoderosas, que ésta es tan mala como la carne de puerco a medianoche y peor que encontrarse a un doberman en la oscuridad y del lado de adentro de la casa ajena.
A mi no me consta pero hay historias que la relacionan con gente de malas artes que sacrifican animales tiernitos pero que no los venden al Rincón del Viejo ni al restaurante Nuevo León para asarlos a la vuelta y vuelta, sino qué hacen rituales como los de la dirigente de los pobresores mexicanos, pero si a la diablesa que se vista de Prada le cuelgan una zalea de león, a esta la tapizan completita de puras pieles de conejo, de perritos chihuahueños y de hamsters dientones, además la embarran de miel y le ponen yogurt entre el occipucio y la rabadilla quesque para que atraiga a los hombres de dinero.
De esta historia tengo más datos pero se los daré a conocer en el siguiente capítulo de esta misma columna. Hasta entonces.