"La cosa es de terror" le dijo el Papa Francisco a don Gustavo Vera, presidente de la fundación La Alameda en la República Argentina, refiriéndose a la incontrolable narcoviolencia, y agregó: "ojalá estemos a tiempo de evitar la mexicanización", lo que me parece raro, es que, en México se hayan escandalizado tanto los servidores públicos de alta alcurnia, además, la situación que se padece en todo nuestro territorio, ya no es un secreto para nadie, si todos los días, por este motivo, nuestro polarizado país, está presente en los medios internacionales difusores de noticias, por ejemplo, Nuevo Laredo se encuentra en el deshonroso top10 de las ciudades más peligrosas para vivir de todo el planeta y Carlos Canturosas en lugar de tratar de detener la barbarie, se le ocurre organizar un festival del tequila para emborrachar a todos los jóvenes, el tequila es una bebida noble, de eso no tengo ninguna duda, pero puesta en la calle con el permiso de las autoridades, es un cóctel molotov para las mentes de los muchachos, que sintiéndose liberados de su encierro forzoso, obedeciendo un toque de queda obligatorio, se vuelven locos de alegría al poder respirar aires nuevos, reacción peligrosa si se toma en cuenta que a los malandrines no les gusta que la gente decente ande suelta en las calles de las que ellos se han adueñado, ese alcohol subido en la cabeza envalentona a cualquiera, y Dios guarde la hora, de que suceda una tragedia, pero que no se sientan ofendidos nuestros funcionarios, si es verdad lo que le ha dicho el Papa, en un correo electrónico, al influyente legislador argentino, México es un bastión de los mafiosos de todo el continente, estos políticos nuestros son como los bravucones de taberna, que se agarran a tiros con cualquier parroquiano si les mienta la madre, pero a su sacrosanta progenitora la tienen muerta de hambre en su jacal, es decir, se indignan por lo que ellos mismos han permitido, auspiciado y protegido durante muchos años, pero no hacen nada por remediarlo, y el que, se ha vuelto loco de al tiro, es Donald Trump, y ha estado tan enojado, que en una de sus rabietas por poco se le cae el chuchuluco con el que se cubre la calva, el multimillonario Gringo, dueño del obsoleto concurso Miss Universo y al que le encanta el mitote de la farándula, como que no estuvo muy de acuerdo con los Óscares obtenidos por Birdman de González Iñarritu y en su cuenta de Twitter le echó hasta qué se cansó al cineasta mexicano que digan lo que digan sus envidiosos detractores es muy talentoso y está marcando una época en Hollywood, luego que la industria de la meca del cine decayó en películas de alto presupuesto pero de pésima calidad con churros infumables, pero al naco Donald que es un Wicho Domínguez cualquiera, como tantos nuevos ricos que hay en México, que no saben ni la O por lo redondo, ya se le fue la mano con tantos insultos para Gonzalez Iñarritu y los mexicanos, todo empezó esa misma noche cuando Sean Penn, quien es muy amigo del director mexicano, le dijo, en tono de broma, en un sarcasmo cariñoso... "Quién le dio la green card a este hijo de perra" en franca referencia a que su talento les estaba quitando los buenos presupuestos a directores como él que son de medio pelo, pero no lo expresó de mala leche ni con encono, finalmente, la envidia de los mediocres es admiración desplegada para las personas destacadas que los catapulta a los cuernos de la luna, en esta columna, ya no cabe la historia del diputado local panista Sergio Gómez Oliver, dueño de un zoológico chiquito en Tehuacán, Puebla, que las autoridades le clausuraron por malos tratos a los animalitos, como el zoológico de Nuevo Laredo que es un mugrero en donde a un león de gran tamaño lo tienen en una jaulita de dos por dos, pero mañana se las comento completa, queridos lectores.
martes, 21 de abril de 2015
El Papa. "Mexicanización de Argentina"
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