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viernes, 2 de diciembre de 2011

No creo en los horóscopos


Nunca he creído en los horóscopos, mucho menos,  con eso de que mi regente el planeta mercurio está retrógrado desde mediados de noviembre, cuya mala influencia astral me pone en un estado de impaciente incredulidad, lo bueno es que para el 13 de diciembre, vuelve a transitar directo por mi signo, que es de aire y como sagitario predominará en el transcurso de este mes, es de fuego, así que, de seguro tendré varios incendios apasionados durante las posadas, además, es mentira lo que dicen los astrólogos que estamos regidos por la posición de los cuerpos celestes, ni modo que sea cierto que yo soy de doble cara, ni que fuera pariente de la máistra Elba Esther que en un sexenio está con el PAN y en el otro, con el PRI, así que hagan lo que yo hago, queridos lectores, y no se asomen a los vaticinios de los especialistas del área, a menos de que se trate del Dr Zellagro o de Madame Zazú, ya ni les digo de Yovanita, porque ella está en el cielo mirando las estrellas en tercera dimensión, ustedes, sagaces como son, asiduos fans, de seguro han de estar pensando y este cabrón cómo sabe todo eso, no se asusten, lo que ocurre es que he consultado el oráculo de la Sibila de Bustamante, que todo lo sabe, y lo que no, lo inventa, la verdad, es que no soy muy dado a confiar en esas chimistretas, pero como ella me aseguró que varios políticos de altísimo pedorraje, son clientes habituales de su negocio de adivinería, pues, me interesó el asunto, para que me dijera los nombres de dichos personajes, por supuesto, que confiando en mi evidente carisma espiritual, le hice manita de puerco a la hechicera para que soltara prenda de los susodichos, por tanto, ahora que tengo la ristra de los patronímicos, he de publicar, uno a uno, conforme se presente la ocasión, los designios de sus destinos en la vida pública del globero pueblo y del glorioso estado de Tamaulipas, conste, que no revelaré sus identidades, no vaya a ser el diablo, que en todo está nomás para andar chingando a los cristianos de buena fe, me meta en líos gordos con la cofradía de los mandamases de nuestra comarca, uno de esos, de los que ahora están en el candelero, se irá a otra ciudad con un nuevo puesto, y es que, tiene un buen padrino que le anda empujando el carritos de los camotes, a otro de medio pelo, le irá como en feria, pero no la de Expomex, que esa, no se realizará nunca más, sino como la frase lo indica, en el dicho popular, le lloverán madrazos hasta por debajo de la lengua por andar de vociferoso contra nuestras sagradas instituciones que rigen las conductas de la sociedad en general, lo bueno, es que, ustedes, queridos lectores, no andan de chismosos por los pasillos palaciegos de nuestra vernácula polaca, si no, tomarían mis buscapiés, en contra de los personajes a los que me refiero en esta sabatina Guillotina –me salió en verso y sin esfuerzo--, La Sibila, que se pinta sola para andar protegiendo a los políticos con sus artes milenarias de bruja poderosa, me dijo, que habrá muchos cambios, pero que esos movimientos, habrán de beneficiar al club de Tobi y a todos sus compadres, que han sido los perpetradores de golpes bajos, patadas en la espinilla y mordidas en las nalgas a los que van de salida del gabinetazo, en fin, como quiera que sea, les ruego encarecidamente, que no se lo digan a nadie si no les tienen confianza, y acuérdense que eso de los horóscopos es una vil mentira, es una patraña inventada por los ociosos para recaudar incautos que hablen a los teléfonos de sus despachos estelares, por cierto, ya me tengo que retirar de la computadora, y es que, tengo que marcar al número de doña Mirtha La Cabezona, que me está haciendo mi carta astral, para que me cuide de mis amigos, que de mis enemigos me cuida Dios. Tengan cuidado que también Urano y Neptuno están medio encabronados, por Plutón no se preocupen, ese, ya no es planeta, sino una pinche estrellita que no tiene ni un chisguete de luz. Ya dije. 

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