Ya empezó el mundial

Ya empezó el mundial y los habitantes del planeta, con excepción de uno que otro contreras, están inmersos en la fiesta pambolera, yo, que me perdonen los que le van a otro equipo, soy americanista de hueso colorado, en un permanente homenaje a mi querida hermana Alma quien siempre fue entre marotona y charra; le encantaba el futbol, de hecho lo jugó de niña a diferencia de otras chamaquillas que se la pasaban vistiendo a sus muñequitas, ella jugaba a la pelota con todos los hombres del barrio y no que tuviera otras preferencias sexuales, sino que simplemente era su gusto por dicho deporte.
Era apasionada de la selección y a pesar de que sabía las escasas posibilidades que “la decepción” pasara a las siguiente fase, como quiera desde temprano preparaba pinturas, confeti, silbatos, serpentinas, globos y trompetas para apoyar “con todo”, según sus palabras, a la bola de buenos para nada de los jugadores que al final de la justa mundialista terminaban haciendo el ridículo con números vergonzantes, pero eso era lo de menos, el chiste era que nos juntáramos todos en la casa familiar para sentarnos a ver el partido con todo lo que ello implicaba, es decir, con los nervios propios de aficionados sabedores que ni en sueños se podría ganar la copa mundial, y es que esta runfla a pesar de contar entre sus miembros activos (no es albur) con jugadores que militan en equipo europeos, tales como Carlos Salcido que tiene cara de sorcho del cuartel Macario Zamora, Rafael Márquez que dicen le anduvo enseñando a cabecear dentro del área chica al Potrillo hijo de Chente Fernández, Guardado que tiene cara de “vendequesos”, Giovanni Do Santos que es bien parecido… a un chango, Carlos Vela el hijo de repelotera madre que falló uno que era casi imposible de fallar, Chicharito Hernández, Ricardo Osorio, Maza Rodríguez, pueden ser capaces de no pasar a la siguiente ronda, lo que se me hace totalmente injusto para la afición que está esperanzada a que hagan un buen papel con los dos morenos bien puesto, y conste que no me refiero a Yio y a su hermano Yona, que ya saben ustedes que al negrito brasileño con acento regio, lo echaron de la lista final como a las chachas respondonas.
Esta columna la redacto en la madrugada del viernes, a cuatro horas de que empiece el juego inaugural, que le toca defender a nuestra selección contra el país anfitrión, los sudafricanos no son malos para jugar, tienen, sobre todo poderío físico, pero hasta donde tengo entendido no son ejemplo de excelencia, ya se sabe que estos equipos de negros, son casi unos papanatas, bueno, no quiero decir que son como Trinidad y Tobago, pero muy similares, así que lo más seguro es que ayer le hayan ganado a Sudáfrica, y una de las grandes sorpresas es que el presidente Calderón siempre si le dieron permiso para asistir al primer juego, nadie ha podido confirmar si se va a quedar todo el mes, con eso que México es el país de las maravillas donde todo está bajo control, pues el mandatario de este paupérrimo país donde viven los 100 millones de seres humanos más pobres del mundo y uno de los hombres más ricos del planeta, decidió que era más importante apoyar a la selección que quedarse a ver que se necesitaba para enderezar la nave de los tenochcas, la verdad es que si yo fuera presidente de México, también me hubiera ido para echarle porras a los nuestros, que al cabo la nación seguirá igual o peor, además si estos dos sexenios azules no han podido terminar de aniquilarla, no pasará nada por una semana que deja solo el changarro.
Será un mes de futbol día y noche, así que las señoras, señoritas, similares y conexas vayan acostumbrándose a que se quedarán solitas, lo bueno es que podrán ocupar su tiempo para hacer chambritas, cocinar y bordar, lo único malo es que las señoras ya cambiaron el punto de cruz por el punto com. Suerte para los nuestros y que mínimo queden entre los mejores ocho equipo del mundial, Ok No, ya sé que estos buenos para nada se regresarán antes de una semana, en fin, que sea lo que Dios quiera y que Jiová de los ejércitos nos agarre confesados.