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viernes, 23 de julio de 2010

Tláloco Marcelo

Marcelo Ebrard con más ganas de salir en la tele que de informar a la población, salió a anunciar en cadena nacional que el D.F sufriría lluvias atípicas por tres días, nada más le faltó agregar que mandaría a hacer un arca enorme para trepar a parejas de todas las especies de chilangos en su gran diversidad biosocial, lo malo es que nada de lo que dijo resultó cierto, ya para pasadas las dos de la tarde del jueves, el Servicio Meteorológico Nacional salió a deslindarse de esos pronósticos del clima, y como bien dice el admirable editorialista don Juan Pérez, los meteoros no cambian de ruta, los que se equivocan en sus vaticinios son los fementidos especialistas, pero en este caso, el que exageró la nota quien sabe con qué aviesas intenciones fue el pre candidato del PRD a la presidencia de la República, a lo mejor para luego erigirse en el gurú de la lluvia, una especie de dios Tláloc de petatiux como lo diría el Loco Valdez, como de esos santones fabricados por la imaginación de Juan Rulfo, un Anacleto Morones cualquiera.
El miércoles no llovió tanto, digo, lo mismo de siempre en estas temporadas de lluvias en el D.F, yo que viví allá puedo atestiguar el hecho real de que todas las tardes llueve como si se fuera a caer el cielo, pero eso es de todos los días, sobre todo en el área boscosa, el agua cae en espadas heladas sobre el pavimento, los capitalinos siempre salen con su paraguas en la mano, y es que es lo más natural de la cotidianeidad de la vida en la gran ciudad, además, lo que para ellos es un calorón insoportable son 23 grados centígrados, o sea que le exageran a su verano, aquí esa temperatura es como para salir en suéter y los exagerados chilangos se están asando bajo los inclementes rayos del sol que solamente se pueden ver en su imaginación.
El carnal Marcelo que ya se está haciendo un experto para eso de las conferencias de prensa con todos los medios a su disposición, lo dijo en un tono como si de verdad fuera el preludio del apocalipsis, lo malo es que los capitalinos ya no le van a creer ni el Ave María, porque también anunció hace unos días que a la primera pareja homosexual que se casara le regalaría el viaje de luna de miel a Buenos Aires para que se fueran a bailar un tango a la tierra de Gardel, mientras hacía el anuncio, todos los reflectores sobre su cara de investigador de la UNAM para aparecer en los medios difusores de noticias del país.
Lo raro, y eso nunca había pasado en la historia del clima en México, es que el subdirector del Servicio Meteorológico Nacional, haya salido a deslindarse de dicho pronóstico como si las predicciones del departamento más inexacto de todos, no hubieran fallado alguna vez, detalle que a mí me causó mucha risa, si estos buenos para nada, no tienen los aparatos de vanguardia con los que cuentan los gringos, así que tampoco pueden presumir de que manipulan tecnología de punta para realizar sus desatinos climáticos, pero alguien les ha de haber dado “Línea” para salir a desmentir al regente que con todo y que les hizo playas a los capitalinos y que ha hecho buen trabajo en algunos rubros, pues con estos dislates tan desproporcionados, ahora los chilangos no volverán a confiar en su palabra, que me perdonen todos sus fans pero si me dieran e elegir entre Ebrard y López Obrador para la presidencia de México, escogería a la gorda Paredes que por lo menos se viste muy bien y siempre está en buena forma física para ser la imagen viva de la abundancia vernácula de nuestra patria.
"Vamos a tener miércoles, jueves y viernes, lluvias totalmente fuera de lo que habitualmente tenemos, fuera quiere decir mucho mayor, ¿qué tan mayores? Es difícil predecir a ciencia cierta pero lo que si podemos saber es que vamos a tener lluvias muy fuertes". Y todo eso que dijo, nunca ocurrió. La intención fue buena, pero los dioses de la lluvia lo hicieron quedar mal, ái pa’lotra carnal Marcelo.

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