!Qué Bárbara!

Ana Bárbara, la cantante grupera que hace algunos años armó un escándalo al amancebarse con “El Pirru” a pocas horas de fallecida la actriz Mariana Levi, ahora ya separada de él con dos hijos a los que tendrá que mantener de por vida, ya que como es bien sabido por todos, el hijo putativo de Jackeline Andere es un baquetón bueno para nada que nunca ha chambeado, está metida en el peor lío de su vida, y es que según testigos de los hechos, han asegurado que la popular intérprete de música cumbianchera, iba manejando la troca que atropelló y dio muerte a una pobre señora que iba cruzando la calle en el paradisiaco Cancún de la mano de su hija que con justa razón ha puesto el grito en el cielo para que la encierren.
La cantante ha asegurado que no era ella la que iba manejando la camioneta sino un amigo de su hermano, pero un chismoso taxista en su declaración ante el Ministerio Público ha asegurado que él con sus propios ojitos de cabrón argüendero vio ante el volante a Altagracia Ugalde que ese es el verdadero nombre de la artista, que sin duda es una de las “grandes” estrellas del espectáculo mexicano que más portadas y notas de ocho columnas se ha llevado en los últimos años, ya que si no es su papá don Antero que en lugar de andar ordeñando las chivas en su rancho de Río Verde anda de viejo mitotero, es su hermana, o su ex marido El Pirru, o su nuevo disco, o su casa, o lo que sea, pero siempre está en los medios, claro que eso le conviene porque al estar apareciendo en todos lados, pues aumentan sus ventas de discos y se saturan las contrataciones, aunque ahora que se arrejuntó con este bueno para nada, pues su ascendente carrera artística se vino en picada, a ver si con este bombazo de notas se le catapulta de nuevo la carrera y es que algo bueno tiene que resultar del líazo en el que se ha visto envuelta a raíz de que machucó a la señora y por desgracia la mató, bueno, no es que la esté culpando, sino que me refiero a que ella iba en el vehículo que arrolló a la cristiana que perdió la vida, ya saben ustedes, queridos lectores, que yo no soy nada chismoso, a veces se me va la boca de más y conforme voy tecleándole pues suelto uno que otro comentario con veneno, pero ya casi no, la verdad es que ahora que me he vuelto casi un santo, pues no tengo el temperamento adecuado para andar de boquiflojo, bueno, les contaba del chismazo de Ana Bárbara que dicen que traía aliento alcohólico y que a la hora del accidente automovilístico se bajó corriendo para tratar de evadir a la prensa pero que un policía de esos de crucero, muy celoso de su deber, le impidió que se escapara rumbo a un centro comercial, ya sé, que esto parece una nota de “ventaneando” pero no hay ninguna otra posibilidad de que sea de otra manera, si estas artistas de quinta son especialistas en dar amplio margen al chacoteo con sus vidas porque como no tienen más talento que andar de tálamicas aventureras, o sea de cama en cama, pues no hay posibilidad alguna de que no den rienda suelta a sus dotes de publicistas de sus propias carreras para aparecer en todos los programas que viven del chisme, el morbo y la intriga.
Ya verán que luego del tremendo bum publicitario, al rato saldrá a relucir que no fue ella la que machucó a la señora, lo que sí es un hecho es que ya se separó para siempre de El Pirru, y no que esta cantante grupera había declarado a todos los periodistas que era el hombre de su vida y que lo amaría para siempre, pues el amor no le duró tanto, a ver ahora que despotrica de su amorcito, que por lo visto es toda una fichita que primero las convence de que es un príncipe azul y luego las fastidia, claro que les jinca dos o tres huercos, y conste que Ana Bárbara es como la décimo quinta esposa que se le conoce legalmente, en fin, espero que se solucione todo este lío para la grupera y me alegro que haya abandonado a este viudo negro que tanta mala suerte le trajo a la reina de los nacos de este país. Ya dije.