Ya lo sabía

Monna Bell, una guapa cantante chilena afamada en México, en los años sesenta, cantaba aquello de: “ya lo sabía, ya lo sabía…” algo de un telegrama, pero en este caso me refiero a lo del triunfo anunciado de Eruviel Ávila en el Estado de México, no quiero menospreciar su victoria tricolor, nada más que no es lo mismo pelear contra postulantes de peso pesado, que luchar por treparse a la silla poderosa con estos que ya estaban derrotados antes de iniciar la campaña, y es que, a don Luis Felipe Bravo Mena y al santoclos Encinas los avientas en una licuadora y no hacen espuma, según los resultados finales del conteo de votos, ni aunque todos los partidos comparsas del PAN y del PRD se hubieran aliado para agenciarse una carretada de votos, lo hubiesen podido lograr, 62.56 por ciento es una ventaja aplastante, supongo que en este momento, han de estar echándose la culpa de la derrota unos a otros, el más hablador es Encinas, que ya dijo que todos los ciudadanos mexiquenses son unos idiotas por haber votado por el PRI, ahora resulta que, si hubieran votado por su persona, entonces sí, los electores, serían muy inteligentes, y ni modo que con su 21 por ciento de los votos, pueda gritonear que fue un fraude estructurado desde la oficina del Gel Boy, estos amarillitos son como mi tía Espiridiona, que cuando perdía a la baraja le arrebataba el dinero a los demás, pero el resultado de Bravo Mena es como para echarlo a patadas del partido azul, y de pasadita mentarle la madre al inteligente panista que le dijo podía hacer un buen papel en esta difícil contienda, realmente, ahora no tienen nada qué decir que los defienda de su ignominioso desempeño en la campaña en la que se jugaban una buena posición estratégica para las próximas elecciones presidenciales del 2012, amén que no es cualquier cosa la vasta región del estado de México que según los mentirosos del Inegi en confabulación con el IFE es donde hay más población en edad para votar de todo el país, así que, viéndolo desde la perspectiva de los planeadores de las campañas, El PRI la tendrá más fácil para ese entonces, algunos analistas vernáculos dicen que tuvo mucho que ver en esta victoria priista, la imagen aliñadita de Peña Nieto, bueno, supongo que también la publicidad pagada por el gobernador mexiquense que ha salido en la televisión durante todo el año, y como tiene permiso de los consejeros del IFE, ya que como mandatario estatal, por ley, puede anunciar los logros realizados en su gestión priista, con esta patada en el yunou a los ardidos de Chucho Zambrano y Gustavo Madero, presidentes de los partidos perdedores, nada les queda por decir, yo les aconsejaría que agarraran sus chivas y se fueran por la vereda tropical, porque lo que sigue en la campaña nacional es para hombres de verdad, no para payasos bocones, se trata de la madre de todas las batallas, el único prietito en el arroz de los triunfos de PRI en el estado de México, Nayarit y Coahuila, es que Moreira que tiene tipo de padrotillo de barrio, haya impuesto a su hermano como mandamás en el estado, digo, como si no hubiera otro hombre en toda la comarca lagunera, al profe Moreira nada más le faltó declarar a voz en cuello, como aquel inolvidable José López Portillo en la era de las vergüenzas del país, en que unos cuantos se repartieron, codiciosos, a México como si fuera un botín de corsarios… “es el orgullo de mi nepotismo”, ahora faltan las reacciones de López Obrador respecto al chafa papel de su Gallo Golón, de seguro dirá que es un fraude, si eso es lo único que sabe decir, este es como los bravucones de vecindad, cuando no pueden contra los grandotes gandallas, les mientan la madre y se van corriendo, en fin, Eruviel, Peña Nieto y Moreira son los elegidos de los dioses, habrá que esperar con qué novedades nos salen los que se quedaron con las ganas de encaramarse al poder, en este caso, sobre todo, con los pésimos resultados de Bravo y el santoclos. Ya dije.