Yo soy aquel...

No hay duda, estamos peor que en tiempos de los bandidos de río Frío, al menos en esa época se tenía la confianza de que jamás atacarían a los jodidos, pero ahora ni los pobres se salvan, en fin son los tiempos que corren, ojalá que ya se acabe esta incertidumbre que estamos viviendo, por otra parte, les tengo que contar que estoy bien contento al percibir que todo esto va a cambiar favorablemente, no sé ni porque se los digo pero parece que el cambio ahora si es real y no son chistes de alguien que quiera engañar a la ciudadanía, yo he denunciado todo lo que estamos padeciendo en nuestra ciudad, si a mí, nunca me ha gustado tapar el sol con un dedo, ya sé que el tema es muy complicado, pero nunca me ha gustado ser tapadera de nadie, al fin y al cabo nadie me conoce y es muy difícil trazarme en esta ciudad en la que parece que todo mundo se conoce, pero siendo que no soy tan popular como yo pretendo, pues vivo en el anonimato vil, pero estando la situación tan complicada, prefiero estar así a que cualquiera sepa mi paradero y venga a meterme un susto, además no soy rico ni cosa que se le parezca, vivo al día como casi 50 millones de mexicanos que muy apenas conservan el alma uncida al cuerpo, y eso con muchos trabajos, ya que como se sabe, no hay empleos y los que hay son mal remunerados, no sé si les he dicho, pero en Twitter, siendo que soy una de las cinco personas más leídas en nuestro idioma, naturalmente que estando en un ambiente de estrellas del pop, pues en primer lugar a nivel Latinoamérica está la flaca de Anahí y luego Daddy Yanqui, en tercero casi siempre estoy yo, a veces otros, pero tampoco me quita el sueño ya que ellos tienen cientos de miles de seguidores y yo apenas unos cuantos miles, lo que pasa es que de un tiempo a la fecha, pues me ha tocado la suerte de conseguir más followers conforme ha transcurrido el tiempo, lo que pasa es que son tantas horas en que he estado en la red social de moda, que no ha habido manera de sustraerme a las millones de personas que utilizan dicho artilugio inventado por el hombre blanco, y es ahí en el que he dicho todo cuanto se me ha antojado, además, por si no lo saben, según las estadísticas si en Líder Informativo, mi casa hecha de palabras me leen muchos fans, en Twitter me leen muchísimos más, y es que mi estilo es reconocido entre la gente que se conecta de todos los países, ya que mi Time Line (tiempo de vida) está integrado por gente de todos los países, igual de Argentina, Ecuador, Brasil, Chile, Nicaragua, España, Australia, Estados Unidos, Indonesia, Italia, que de los países bajos, y no estoy hablando de los enanitos toreros, que como se sabe, son prefiguraciones espirituales que se juegan la vida de bufones en los ruedos para deleite de los espectadores que se regocijan con los valientes que se enfrentan a la huesuda, por supuesto que no me jacto de nada, siempre he sido afortunado de estar en los primeros escaños de cualquier lugar en el que me he parado, igual de columnista que de promotor de las buenas causas sociales cuando estuve en ciudad de México ayudando a los necesitados apoyando el voluntariado de mi amiga la Dra. Gina Zuno a quien le agradezco su invitación a colaborar en su asociación civil, y no hablo nada más por hablar, que de todas esas experiencias existen pruebas fehacientes que dicen más que mil palabras, en fin, que estoy muy contento de mis logros y no estoy diciendo que soy el non plus ultra, si gracias a Dios que me ha puesto en el sitio exacto en el momento preciso, para realizar cada uno de mis actos a favor de los demás, no digo, no, que sea el mejor ser humano que exista sobre la faz de la tierra, si nada de lo humano me es ajeno, también he cometido uno que otro pecadillo que ya el Altísimo se encargará de pasarme la factura cuando lo juzgue conveniente y necesario, pero mientras se llega el momento, aquí seguiré dando lata en esta Guillotina que gracias a la indulgencia de mis editores sigue siendo, luego de un par de años y algo más, la columna la más leída del periodismo vernáculo, ya mañana les contaré algo de lo que me ha pasado en este lapso de tiempo que aunque parezca poco, en el ámbito periodístico es mucho más que en otro. Ya dije.