Soy más fiel que un perro faldero, de hecho, nomás tengo
ojos para el objeto de mi amor, así he sido desde siempre, lo único malo es que
rara vez me he enamorado, no soy melcochoso ni cursi, a veces, he regalado
poemitas escritos en servilletas Lys, pero de eso hace tantos años que ya ni me
acuerdo a quien se los regalé, si, por supuesto, que escribo poesía, no de a
gratis estudié en extranjía, que yo sé, que eso ha de causar escozor entre los que
muy apenas pudieron cursar primaria en alguna escuelita de gobierno, pero ni
modo, no tengo la culpa de haber nacido con más luces en la mollera, espulgando
en la web, de aquí y de allá, me topé con un poeta joven que responde al nombre
de Carlos Conde, y miren ustedes, que bien hilvanado está el poemita que me
reconcilia con las letras mexicanas: “Habría que limar los versos/ y
despojarlos de frases hechas/ de metáforas inaprensibles./ Pasar encima el filo
del cuchillo/ y rasurar el texto palabra por palabra./ Purgarlo de adverbios y
adjetivos./ Deshacerse luego de núcleos nominales/ podar estas líneas/ hasta
abstraer en los trazos de las letras/ alguna forma vaga de caléndula/ y tal vez/
entonces/ Ninfa/ tu belleza vendrá para habitar la página.” Por cierto, desde la columna de ayer, tenía
que haberles comentado que este viernes 21 de Septiembre, amanecí en el puesto
número 3 de los tuiteros más recomendados en México, es decir, del ranking del www.followfriday.com si, ya sé lo que
han de estar pensando, pinche pelado ocioso, pero será peor su comentario en mi
contra, si les confio que estoy rankeado como el top20 de los tuiteros más
recomendados a nivel mundial, decía mi abuela Ponciana que no era nada más
poner el huevo sino también cacarearlo, así que, si alguno de ustedes, que
nunca faltan los incrédulos, quiere asomarse al sitio, ái les dejé el vínculo en
líneas anteriores, para que se den un ligero quemón de mi extrema popularidad
planetaria, por cierto, y les juro por Dios que me mira, que no sé en qué momento
me catapulté de un tuitero común y corriente a una celebridad mundial, lo que
es mejor todavía, que el reconocimiento no es de ninguna página robotizada sino
de mis propios seguidores en la red social de moda, y de verdad que me asombró
que de un momento a otro, tuve más de 15 mil hits a mi columna “132 hijitos de
papi” en la edición digital del www.liderinformativo.com
por lo menos, mi popularidad de andar en el Twitter dia y noche, ha rendido los
frutos esperados, francamente, prefiero que lean mi trabajo editorial, a que
lean mis tuits, y no se les haga raro, que en cualquier momento, me les vaya a
Le Monde o a El País, naturalmente que jamás abandonaré esta mi casa editorial,
es más fácil que me echen de aquí por elemento gacho, a que yo me vaya solito
por otra verada tropical, ahora resulta que el Julio César junior subió al ring
bien grifo, o sea, eso es como andar anestesiado para que el contrincante lo
hubiera medio matado a madrazos, Sulaimán que es un viejo lobo de mar y el
mero, mero para los asuntos del Box, no de balde ha sido el gran capo del box de
todo el mundo, ha salido a declarar a favor del retoño del César del boxeo, así
que, sin duda, queridos lectores, en cualquier momento, se rodará una película
con el tema central del papá de Julito y acerca de que un hijo de tigre es pintito,
dicen los enterados que le van a quitar los tres millones de dólares que ganó
en la pelea, pero eso si está mal que lo hagan, digo, si hubiera ganado otra
sería la historia, pero la mota no da para arriba, al contrario, digo, no
quiero hacer apología a las drogas, pero si se hubiera inyectado thinner o
aguarras, pues entonces sí, que lo multen y lo retiren del boxeo, pero por un cigarro
de mota, ni en la secundaria hay castigos tan severos, que le den dos nalgadas
con la mano mojada y que lo pongan a hacer talacha en su casa y es pena
suficiente para el huerco que si se de verdad se aplica puede llegar a
convertirse en una estrella mundial del deporte.
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