Aquí no hay Grito

En Nuevo Laredo jamás hemos festejado el Grito de la Independencia, así que, esa noche, en la que, los patriotas de todo el país, se vuelcan a comprar banderitas y cadenitas tricolores de papel de china, en este mi terruño natal, somos más parcos que un judío en navidad, o sea, no se organiza una reunión familiar, sin embargo, en el caso del Thanksgiving, podría decir todo lo contrario, a pesar de que es una fiesta gringa, hasta los más jodidos, se juntan en casa de la mamá, de la suegra o de una tía gorda, pero no porque aquí no lo celebremos, voy a desdeñar el hecho noticioso, de que al presidente Calderón, unos malandrines escondidos entre el gentío, mientras le daba sus jalones a la reata del badajo que hacía sonar la campana, le lanzaban lucecitas de esas de rayito láser en la cara, y claro, que el primer mandatario se enojó muchísimo con su estado mayor presidencial, ya que, su vigilancia dejó mucho qué desear, en la plancha del zócalo, se podían ver mantas de varios metros de ancho, además, en siendo el último grito, en que la primera dama doña Margarita Zavala, con su habitual estilo elegante y sobrio, lució una creación de Macario Jiménez, al que, por circunstancias ajenas a mi voluntad, conocí en la casa de un famoso arquitecto mexicano, sólo que en aquellos tiempo, la única que se ponía sus diseños era su amiga del alma Nailea Norvind, y luego, las televisoras, a las que, claramente, el gobierno federal no le compró el tiempo al aire, porque en lugar de pasar como siempre lo han hecho, el color de las fiestas en todos lados, Televisa pasó la mala pelea del Canelo Álvarez quien le ganó a un pendejete que no sabía ni meter las manos, y el otro, el junior de Julio César, otra papa que no metió ni los guantes para parar la chingotiza que le estaban metiendo, pero dicen, los que lo conocen en persona, que es un plebe (huerco) que entrena cuando se le hinchan las ganas, que ni caso la hace a sus papá, y además, su famoso papá, siempre anda en el agua, bien pedo y bien loco, así que, no le exige disciplina a su chamaco, pero eso ya no es noticia, de hecho, en Twitter, nadie comentó ni El Grito ni las peleas, lo que si se tuiteo y retuiteó hasta el cansancio fueron las fotos de Catalina la esposa del segundo en la línea de sucesión al trono de Inglaterra, o sea el príncipe Guillermo, si yo les digo, queridos lectores, que la reina Isabel se va a morir de un entripado, porque esto ya es demasiado, por lo visto, Kate Middleton, que flaca, flaca no está, que en esas imágenes se le ven dos enormes razones por las que el futuro rey de los ingleses, se enamoró de ella, y es que, a los duques de Cambridge como no tienen nada más qué hacer que andarse oreando, les encantan las playas, los antros y las fiestas hasta el amanecer, finalmente, los tiempos cambian, y aunque Su Alteza Real Chabela se enoje por la desenfrenada vida social y sexual de sus nietos, no los va a poder hacer cambiar, que la juventud actual tiene sus propios códigos de conducta, que lo que hace cien años era mal visto, ahora, que una guapa mujer anda enseñando las chiches a un amplio público, ni siquiera dada la digna investidura de la hermosa Cata, es mal visto por nadie, y si, la mamá de estos dos rebeldes, nunca enseñó el cuerpecito, fue porque estaba más flaca que un palo de escoba, dicen, que la corona británica, tiene la capacidad legal de meter a la cárcel a los editores de los medios difusores de noticias por ventilar las vidas privadas de sus miembros, (conste que con la palabra miembros me refiero a los integrantes de la corte real), en fin, que ya para terminar mi columna, me acabo de enterar, gracias a mi corresponsal tuitero en Italia, que saldrán publicadas cientos de fotos topless de la guapa Kate,  en una revista propiedad de Silvio Berlusconi el sátiro poderoso, supongo que para cuando esta Guillotina esté en circulación, esas imágenes ya le habrán dado dos veces la vuelta al mundo.