#EsCosadeIndigenas

Digan lo que digan los panistas y sus correligionarios, la realidad, es que, a los mexicanos todos nomás falta que nos mee un perro, y no me refiero específicamente a que no hay dinero que alcance para sobrevivir en este nuestro pauperizado país, sino a todo lo que ha estado ocurriendo, que por culpa de estos azules, la galopante inseguridad se ha enseñoreado en todos los confines del territorio nacional, antes, muy antes, no es que viviéramos en Pueblo Quieto, si malandrines siempre ha habido, pero ellos se peleaban entre ellos, los pleitos eran entre sus distintas gavillas, de lo que si teníamos que cuidarnos los ciudadanos a pie, era de los per-judiciales que esos si eran unos hijos de la chingada que no respetaban ni a su mamá, aunque algunos ni tenían, no quiero invocar esos aciagos tiempos, que Dios quiera nunca vuelvan, pero en viendo como están las cosas, hay días en que amanezco extrañando a esos cabrones nacos que caminaban presumiendo sus camisas payas en todos lados con sus caras de perdona vidas, por cierto, que los panistas tirados en el piso político mexicano, no han aprendido a quedarse calladitos que así se ven más bonitos, resulta que a la hijita de catorce años del gobernador de la Baja California Sur, se le hizo fácil, tuitear a través de su cuenta @sofiachdz que los mexicanos somos indios porque nos encantan andar subiendo nuestras fotos a Facebook y Twitter a cada paso que damos en los grandes almacenes de Estados Unidos, lo malo es que le dio en la ídem a su madre Helena Hernández de Covarrubias, quien acaba de obtener un galardón precisamente por lo contrario, es decir, por su denodada defensa de los valores en los ciudadanos del estado como el respeto, solidaridad, equidad y acciones de sensibilización para una mejor integración de las familias sudcalifornianas, y aunque su papá ya la regañó por andar tuiteando de más, el daño ya está hecho, y es que, los hijos de algunos políticos se sienten dueños de todo lo que alcanzan a ver sus ojos, muy mal por la niña majadera, pero sin duda su actitud es un reflejo de la educación otorgada por sus padres, así que yo insto al comité organizador que le dio el premio Tonantzin a su mamá, a que se lo quite ipso facto, qué en latín antiguo quiere decir “en chinga”, porque si eso piensa la hija, la mamá ha de tener ese mismo sentir de la gente indígena,, y es que esta muchachita grosera, usó el hashtag, es decir, el tema de moda en la red social, de #EsCosadeIndigenas, para lanzar injurias en contra de los que andan de presumidos en los moles gringos, los que andan pugnando porque se les haga realidad lo de la reforma laboral, pero que no se les vaya a ocurrir chingar más a los trabajadores que ya de por sí, están ganando sueldos miserables para morirse lentamente de hambre, que primero se bajen los sueldos a todos los políticos, o que le hagan como en Dinamarca, que no les pagan ni un solo centavo a los servidores públicos, es decir, son puestos honorarios, en los que, el verdadero pago, es que se les reconozca su honestidad a toda prueba, eso sí, les aseguro queridos lectores, que el inciso que se refiere a la transparencia de los sindicatos, ese no va a pasar nunca, porque se echarían encima a los lideres corruptos, que nunca van a permitir que se les exija claridad en los manejos de los dineros procedentes de las cuotas sindicales, que no son de poca monta, si tomamos en cuenta que a todos los agremiados les quitan directo de su sobre los pesos para tener los derechos de que sus dictadores vitalicios y sus delegados los defiendan de sus patrones abusivos, y espero en Dios, que la dichosa reforma, sea para beneficiar a los trabajadores y no para quitarles los poquitos privilegios que se han ganado con hambre, sudor, lágrimas y sangre