Nuevo Laredo, digan lo que digan, los que ahora se han
trepado al camión azul con rumbo hacia las elecciones locales de este 2013, ha
sido, desde inmemoriales tiempos, más priista que la mismísima Elba Esther, y
miren que la máistra es hechura política de Carlos Salinas de Gortari, aunque
la profe después se haya cambiado de camiseta con el carro del triunfo en plena
marcha electoral del 2000 y luego en el 2006, pero de ese bandazo, a estas
alturas del partido, la dueña del mafisterio, se ha de estar dando de golpes
contra la pared, por haberse confiado y dejar abandonado a su suerte al
revolucionario institucional que ha tomado su segunda bocanada de aire, yo, voy
a esperar a ver quién es el ungido del tricolor en el globero pueblo para
empezar a promocionarlo, y no es porque tenga algo en contra el PAN, pero ya
ven ustedes, queridos lectores, como nos partieron la madre durante doce largos
y aciagos años, y algo ha de estar podrido en los entresijos de ese partido, si
engendró a Vicente Fox que primero le echaba caca al priismo, y después se le
entregó a Enrique Peña Nieto, a pesar de que los panistas de la cúpula se le
echaron encima y directo a la yugular cuando empezó a decir que había que
cerrar filas en torno al copetón, francamente, no creo que el proselitismo de
Fox le haya ayudado a EPN para ganar la contienda electoral del 2012, pero sus
dichos ayudaron a descarnar al panismo, que muy católicos y persinados, pero
bien que agarraron dinero de las canastas de las limosnas presupuestales, de
hecho, el clero, encabezado por su príncipe purpurado Su Excelencia Monseñor
Rivera Cabrera, en su grilla espiritual se ha sumado a los poderosos que poco a
poco han empezado a despiojar las secretarías de la corrupción que se incubó en
las altas esferas en esa docena trágica que sumió al país en una vorágine de
violencia y una miseria galopante en la que se aumentó la cifra de pobres en
varios muchos millones de paisanos que la única posibilidad de que coman tres
veces al día es que se coman promesas incumplidas de empleos que nunca llegaron
y como dijo don Teofilito ni llegarán, pero eso ya lo sabemos todos porque los
ciudadanos jodidos estamos cada vez más jodidos y los ricos cada día más ricos,
estos panistas eran como el padre Maciel que les quitaban el dinero a los
pobres para dárselos a los ricos, pero sobre todo a los del vaticano que
recibieron tantos miles de millones de dólares del michoacano pederasta, conste
que me refiero al santón que se llenó las bolsas de dinero a costillas de los
estudiantes que primero pasaban por su despacho-sacristía para que les hicieran
el examen de admisión a los colegios carísimos de los Legionarios de Cristo, en
fin, que no hay que olvidar lo que nos hicieron, porque si la memoria es flaca
después la vida nos pasará la factura, y las que anduvieron enfiestadas, además
de los periodistas chaqueteros, son las enfermeras que festejaron su mero día
con mole y arroz, pero la verdad, es que hay algunas viejas de estas que son
más malas que la carne de puerco a medianoche, a mí, en lo familiar, me han
tocado varias de esa calaña, que son capaces de hacer daño a los inermes
pacientitos que no esperan que estas blancas palomitas sean perversas y confían
sus vidas en sus manos, pero las del seguro social son las peores de este
gremio, esas, si no se andan por las ramas y se ensañan con los cristianos que
cayendo en sus garras no tienen ninguna escapatoria posible, a mi hermana Ana Lilia
siempre la han atendido estupendamente, pero porque saben bien que yo soy capaz
de ir a la clínica de hemodiálisis y echarles la aburridora para decirles su
precio, espero que, EPN ahora que ha
tomado conciencia de la terrible inoperancia de sus clínicas y hospitales, tome
cartas en el asunto y ponga remedio a esta situación que cada día que pasa es
más intolerable, hay dos o tres médicos y enfermeras del IMSS que se salvan,
pero son miles de trabajadores de bata y cofia que sirven para dos cosas; para
nada y para pura chingada (y a veces ni para eso). Ya dije.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario