Enrique Peña Nieto, ha firmado el compromiso más importante
de su campaña, supongo, que él y su equipo de colaboradores, están conscientes
de la brutal tarascada, que la implementación de dicho programa, representará para
el presupuesto federal, ya sé, que las promesas dictadas en sus demagógicos discursos,
son indispensables para que los políticos se agencien las simpatías de los
votantes, nadie enamora a pedradas, ni a mentadas, un candidato es como el
novio que quiere convencer a su doncella para que se case con él, va y le pide
la mano a su papá, pero lo que el joven en edad de merecer, no dice, es que, al
solicitar permiso para contraer nupcias, la va a llenar de hijos y que la
hermosa señorita tendrá que lavarle sus calzones flameados, hacerle de comer y
se convertirá en ama de hogar, con todo lo que, en ello implica de esclavitud
doméstica, no les he dicho, asiduos fans, a lo que me refiero, no por curarme
en salud, pero a estas alturas de mi avanzado estado de putrefacción
espiritual, ya no carburo como antes, pues, resulta, que el gallo copetón ha
asegurado que si en los hospitales del sector salud, no hay el abasto
suficiente de medicamentos para los derechohabientes, que se les otorgarán
vales para que surtan las recetas en farmacias privadas, no sé, eso como que
siempre se ha prometido y nadie lo ha cumplido, espero que el priista que va
que vuela para treparse al poder con todos sus parientes comodinos y los
compadres incómodos, por cierto, y antes de que se me acabe la pólvora en puros
infiernitos, quiero agradecerle a Su Eminencia Monseñor Gustavo Rodríguez Vega,
excelentísimo Obispo de nuestra diócesis, por haber aceptado mi solicitud de
amistad en Facebook, y es que, pareciera que soy un descreído, pero es al
revés, queridos lectores, me considero un católico de la vieja guardia, por
supuesto que rezo el rosario a diario, no, no es broma, eso lo hago desde que
partió al cielo mi santísima madre doña Juanita, a la que le dedico mis cotidianas
oraciones para que Dios no la olvide, como yo también jamás la habré de
olvidar, a veces, solo a veces, otorgo la impresión de que soy un “odia curas”,
nada más alejado de la realidad, si he recibido indulgencias plenarias y
viáticos espirituales de bondadosos sacerdotes, que nunca han visto en mi
persona, un demonio que ha hablado mal de los príncipes purpurados, sino un
católico de rodilla pelona y golpes de pecho, aunque ya pasó un día, espero que
todas las mamás de Nuevo Laredo y de la gente que me lee a través de mi blog
mundial, se la hayan pasado muy bien en su día, que en nuestro país, es el mero
diez de Mayo, o sea, ayer, así, como quien no quiere la cosa, se me vinieron de
pronto las imágenes de la fiesta que organizaba el periódico El Diario en la
plaza Hidalgo para festejar a las mamacitas del pueblo y de toda la región,
para los jovencitos que no vivieron esa gloriosa época de la ciudad, les
contaré que en ese festival se presentaban artistas de talla mundial y se
entregaban regalos caros, antes de finalizar la presente Guillotina, les
transcribiré la bendición que pegó en su muro don Gustavo para felicitar a
todas las madres en su día, digo, mejor regalo no podría darles a todas ustedes
que se toman el tiempo de asomarse a esta sencilla Guillotina, enseguida, el emotivo
mensaje de nuestro obispo: “Muy queridas y respetables madres de familia. Les
envío desde ahora mi felicitación por el día de mañana, día de las Madres.
Ustedes han respondido al Plan de Dios trayendo sus hijos al mundo. Ojalá
cuenten con la gratitud y el cariño de sus hijos, aunque su mejor recompensa
vendrá de Dios en la eternidad. Que la Madre de Jesús, María Santísima, interceda
por ustedes y les acompañe en sus deberes maternales”.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario