A mi nunca me han encuestado

No quiero ser cabrón con Gabriel Quadri, pero no les parece, asiduos fans, que es un despilfarro de nuestro dinero, que le den tantos millones de pesos a un candidato que no tiene ninguna posibilidad de ganar en la contienda presidencial, lo peor del vergonzante caso, es que el representante del Panal, partido magisterial de la máistra Elba Esther, todavía se siente con el derecho a reclamar que no lo conviden a los debates organizados por los medios difusores de noticias, o sea, está viendo que muy apenas está saliendo adelante con su mediocre plataforma de propuestas políticas más manoseadas que una piruja ebria, y todavía se anda quejando, además, “ya para qué” como dijo el viejito cuando le dio el si la muchachita veinteañera, si muy apenas, con todo y que sus compadres ecologistas van a votar por él, no le alcanza para tener el uno por ciento de los posibles votantes, ya sé, que eso de las encuestas es plan con maña, pero no se conoce otra forma de medir las preferencias de los electores, por cierto, y no quiero ser mal pensado, pero a mí, y eso que tengo muchos años viviendo en el mismo lugar y con la misma gente, en jamás de los jamases me han hecho ninguna pregunta a ese respecto, a menos de que siempre sean los mismos encuestados, hace muchos años, no voy a decir cuántos, trabajé en Inegi, y les puedo asegurar que los resultados no son dignos de fiar, no por el trabajo de investigación de los empleados, sino porque a los directivos inmediatos les viene valiendo madre que los números salgan cuchos, finalmente, a ellos como quiera les pagan su dinerito, así que, los validadores y jefes de dichos muestreos, se dan por bien servidos, al obtener un salario regular por su irregular chamba, pero si las encuestas son sospechosas, lo que es un enigma digno de una telenovela de las cuatro de la tarde, es el hecho de que Josefina Vázquez Mota, siendo que el lunes estaba muy por debajo de @EPN en seguidores en Twitter, algo así como 90 mil de distancia, y el martes, de repente, se le fue arriba con más de 605 Mil, digo, eso es imposible de qué ocurra, a no ser, que alguien le haya cuchareado tuiteros a la cuenta de @JosefinaVM, porque eso de que de pronto, así como así, se esté volviendo muy popular la abanderada panista, pues no, al contrario, en todos lados donde se ha parado a promover su proyecto de nación, le ha llovido camote, bueno, menos en la regia ciudad sultana, y es que, por si no están enterados, queridos lectores, la nota del día es que el inefable Chente Fox se encontró con Josefina en Monterrey, y ocurrió el milagro que él había señalado que tenía que darse para que ella ganara la presidencia, porque, al menos, el esposo de Marthita Sahagún, le dijo que ella era “su presidenta”, lo malo, es que palo dado ni Dios lo quita, y si las noticias escandalosas cunden en la red social de moda, como en aquella memorable ocasión en que el panista ranchero, la enterró políticamente, nomás le faltó decir que se fuera a su casa de la colonia petrolera, casi, casi como dicen que le dijo Fox a Fidel Castro, aquel famoso “comes y te vas”, aunque dicen que el que lo dijo no fue Chente, que él es incapaz de una majadería de ese tipo, sino el entonces secretario de relaciones exteriores, Jorge Castañeda Gutman, que, entre otras cosas, es medio novelero, en fin, que según esto, el gallo copetón ha aceptado presentarse en un debate en la Ibero, lo cual me parece muy raro, ya que se había negado a aceptarlos, pero la verdad, no considero que tenga miedo a confrontarse con sus adversarios políticos, digo, ni Josefina, ni el amoroso Peje, son unas lumbreras para entrar en el argüende mediático, a López Obrador ni se le entiende lo que habla, y a doña Chepina se le va el tiempo en la misma cantaleta, sino que en este momento, no los necesita, va en primero con más de veinte puntos por encima del segundo lugar. Seguiré informando… Cambio y fuera.