Ya se
les está haciendo bolas el engrudo en el caso de los normalistas de Michoacán,
así que, tienen que tomar una determinación urgente, o ponen mano muy dura, o
lo que se viene en cascada son rebeliones mafisteriosas en todos los estados
sureños, no sé, a lo mejor estoy exagerando al generalizar, pero esta gente que
persigue un objetivo no se va a detener ante nada hasta conseguirlo si no los
paran cuanto antes, lo que nunca se descubre en estos asuntos de protestas
callejeras, es la identidad del instigador detrás de todo el tinglado, y que no
nos vengan con el cuento de que están protestando contra injusticias de
asignaturas en su plan de estudios normalistas, ni que todas esas escuelitas
fueran modelos a seguir, y la triste realidad, es que, ya no hay maestros con
vocación de educar a las nuevas generaciones por la satisfacción de hacerlo, o
si existen en México, no conozco a ninguno, pero si en nuestro país, el horno
no está para bollos, en España ni siquiera hay arroz para las paellas, resulta
que nuestros pobrecitos entenados hispanos, se las están viendo muy negras, y
eso que son güeritos, tanto así, que hay
días en que los que se quedaron con una mano adelante y otra, atrás, para poder
comer alubias, se tienen que quitar la mano de atrás, los primeros que han
llegado, son los cantantes españoles, pero detrás de estos convenencieros
buenos para nada, vienen los otros, los
ciudadanos comunes que están muertos de hambre, ojalá que nuestro gobierno les
ponga las mismas trabas a los gachupines, como ellos se las pusieron a los
nuestros, que les pidan tantos requisitos, que prefieran mejor irse a vivir Cuba o a Haití, el que anda que no
cree en nadie, es nuestro alcalde Benjamín Galván Gómez, que anda entregando
obras en todo Nuevo Laredo, la verdad, una de las que más me ha llamado la
atención es la del hospital oncológico que apenas acaba de iniciar sus trabajos
de construcción, pero la buena noticia es la remodelación total del teatro de
la Ciudad, espero que ahora la gente si lo cuide, el que dicen está muy grave
es Vicente Fernández, quesque tiene un tumor en el hígado, y ya se sabe, que
ese órgano no perdona a famosos y ni a ricos, ni a pobres, por lo menos,
Chente, que a pesar de sus canas teñidas, lo que, a mí me parece una costumbre
horrorosa, nadie le dice DON, y eso que ya tiene más de setenta años, supongo
que ha de ser porque lo ven muy cercano desde hace tanto tiempo, a ver que, más
se sabe al respecto del estado de salud del papá del Putrillo, no es por
echarle más tierra, pero la vida pasa facturas, y al otrora ex charro sexy de
Huentitán, se pasó la vida entre los vicios, no hace muchos días, anduvo en
Venezuela y hasta cantó con Hugo Chávez, supongo que fue a pedirle consejo de
su enfermedad, ya que, al parecer, al dictador de la república bolivariana,
también le afectó el cáncer hepático, por las mismas razones que las que
propició la enfermedad al emblemático cantante mexicano, que sea lo mejor para
nuestro Chente, que se mejore pronto para que nos siga cantando con su horrenda
voz de trompeta, antes de finalizar la presente, quiero comentarles que en
Twitter tengo muchos enconos gratuitos, y no porque sea la gran estrella
tuitera, que si lo soy, sino porque ahora resulta que cada tuit que emito tiene
respuesta inmediata como si lo hicieran nomás por estar chingando, pero así
como tengo gente que me tira mala vibra, hay otros, muchos miles, que toleran
mis tuits repetidos y ñoños, después les hago una columna contándoles lo de los
trolles en la red social, que a ese tema le corresponde una completa, y miren
lo que dice el filosofo español de la conexión entre el odio y la envidia: "Triste
cosa es no tener amigos, pero más triste debe ser no tener enemigos, porque
quien enemigos no tenga, es señal de que no tiene: ni talento que haga sombra,
ni valor que le teman, ni honra que le
murmuren, ni bienes que le codicien, ni cosa buena que le
envidien". Baltasar Gracián
(1601-1658).
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